La neumonía es una enfermedad que afecta a millones de personas en todo el mundo cada año.
En 2019, se registraron 2.5 millones de muertes a nivel mundial a causa de la neumonía. En México, la incidencia de neumonía adquirida en la comunidad se reporta del 6% en pacientes menores de 40 años y 11% en mayores de 60 años.
Aunque puede ser una enfermedad grave, muchos casos de neumonía pueden tratarse en casa con el cuidado y la supervisión adecuados. En este artículo, explicaremos cómo cuidar a un paciente con neumonía en casa.
La neumonía es una infección de los pulmones que provoca inflamación y que se llenen de fluidos o pus los pequeños sacos de aire de los pulmones (alvéolos).
El tratamiento depende de la causa de la neumonía (bacteriana, viral u otra) y la gravedad de la misma. La mayoría de los casos se pueden tratar en el hogar.
Los síntomas de la neumonía pueden variar dependiendo del tipo de microorganismo que la cause (bacterias, virus, hongos o parásitos), la gravedad de la infección y la condición general de salud del paciente. Algunos de los síntomas más comunes de la neumonía incluyen:
El cuidado de un paciente con neumonía en casa implica una serie de pasos importantes:
El cuidado de un adulto mayor con neumonía requiere atención especializada y un seguimiento riguroso de las indicaciones médicas. Algunos de los cuidados esenciales incluyen:
La neumonía puede afectar a personas de todas las edades, pero hay dos grupos de edad que tienen un mayor riesgo de desarrollar neumonía:
Existen otros factores de riesgo como enfermedades crónicas o patologías pulmonares previas, tener un sistema inmune débil, y hábitos de vida como el tabaquismo y el consumo excesivo de alcohol.
El cuidado de un adulto mayor con neumonía en casa implica seguir las indicaciones médicas y tener en cuenta ciertos aspectos:
La prevención es una parte importante del cuidado de la neumonía. Algunas medidas preventivas incluyen:
Si los síntomas de la neumonía se agravan o no mejoran al cabo de 5 a 7 días, es importante buscar atención médica.
La tos, que generalmente es seca o con poca secreción, suele persistir por algunos días más, pero con el uso de medicamentos o nebulizaciones prescritas por el médico mejoran con rapidez.
La neumonía es más grave en niños pequeños (de dos años y menores), adultos de edad avanzada (de 65 años y mayores), personas con enfermedades crónicas como la diabetes o enfermedades cardíacas, personas con enfermedades pulmonares como son el asma, la fibrosis quística o el enfisema, personas con el sistema inmunológico debilitado, fumadores y personas que beben mucho.
Cuidar a un paciente con neumonía en casa puede ser un desafío, pero con la información y las herramientas adecuadas, es posible proporcionar un cuidado efectivo y compasivo. Recuerda siempre consultar a un profesional de la salud para obtener el mejor consejo y tratamiento posible.
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